LA MAYOR REGIÓN DE ESQUÍ DE AUSTRIA






Lech, Zürs, Stuben, St. Christoph y St. Anton am Arlberg: la cuna del esquí alpino vuelve a marcar un hito en la historia del esquí. Gracias a cuatro nuevos remontes, a partir de diciembre de 2016 se forma la mayor región de esquí de Austria. El retrato de una región que ha caracterizado el esquí como ninguna otra.

88 telesquís y remontes, 305 km de descensos señalizados, 200 km de rutas por la nieve polvo en una extensión profundamente nevada. Números que hablan por sí solos. Estos números esbozan el tamaño y la anchura única que desde siempre se aprecia en Arlberg. La región de esquí nº 1 de Austria, no solo fascina por sus dimensiones. Lo épico más bien combina con un entusiasmo generalizado y vibrante. El entusiasmo por los esquís en St. Anton, St. Christoph, Stuben, Zürs, Lech desde siempre lo ha sido todo. Una devoción casi de culto para el esquí dio origen al mito de Arlberg. Hasta hoy, aquí nacen los campeones. Hasta nada menos que 83 medallas han traído a casa los grandes del Ski-Club Arlberg en juegos olímpicos y campeonatos del mundo.

LA FAMILIA DE ARLBERG: UNIDOS POR LA PASIÓN POR EL ESQUÍ

El carisma de Arlberg cautiva. Durante décadas, el macizo entre el Tirol y Vorarlberg es uno de los puntos de interés del mapa de los cosmopolitas del esquí y el snowboard internacionales. Ya sea amante del freeride, del freestyle o del esquí clásico: no importa ni la profesión ni la edad. Lo único que realmente importa a la familia de Arlberg es la pasión que todos comparten por la nieve y el esquí. Hannes Schneider y Victor Sohm son considerados los padrinos de este movimiento. Ambos fundaron a principios del siglo XX el deporte del esquí tal como lo conocemos hoy y a la vez convirtieron Arlberg en la cuna del esquí alpino. Celebridades como Stefan Kruckenhauser y Franz Hoppichler han continuado este legado. Técnicas nuevas propias de Arlberg, tales como el wedeln, unos giros cortos muy rápidos, nacieron aquí y conquistaron el mundo. La gran influencia que antaño ejercían los grandes innovadores del esquí desde su Ski Austria Academy, un centro de esquí profesional, en St. Christoph, fue durante décadas el impulso decisivo de toda la disciplina.

LA UNIÓN DE SKI ARLBERG: UN GRAN SUEÑO HECHO REALIDAD
El paisaje perfecto de la mano de gente inspirada en el esquí. Resulta casi lógico que en
Zürs se construyera el primer telesquí de Austria. En la montaña Galzig de St. Anton se construyó el primer teleférico diseñado para funcionar en invierno. Casi tan rica en tradiciones como el esquí es también la pregunta que se plantean una y otra vez los verdaderos amigos de Arlberg: ¿Habrá algún día esa gran estación de esquí? Toda la región es junto con Ski Arlberg desde hace años una de las regiones más atractivas de los Alpes con un solo forfait válido para todas estas estaciones de la región. Pero el gran paso final, la unión técnica de cada una de las estaciones de esquí entre el este y el oeste, seguía siendo un sueño. Hasta ahora. Esta ya se convirtió en una realidad. La unión ha llegado de la mano de los teleféricos que comenzaron a funcionar en el invierno de 2016/17. Se construyeron cuatro nuevos remontes para conseguir al fin lo que durante mucho tiempo era imposible.
Flexenbahn, Trittkopfbahn I y II y Albonabahn II son los nombres de los nuevos nexos de unión que hacen de Ski Arlberg, la mayor región de esquí de Austria.

RUN OF FAME: 85 km. DE DESCENSOS, 18.000 m. DE DESNIVEL ACUMULADO
Lech, Zürs, Stuben, St. Christoph y St. Anton am Arlberg: ya se puede acceder cómodamente en esquís a las cinco estaciones clásicas de Arlberg, incluidas las de Schröcken y Warth. Si desea experimentarlas todas a la vez, puede hacer una excursión de varios días por las diferentes zonas. Y conseguir en el transcurso de este tour de force algo como un best of en pistas ideales y paisajes de ensueño. En este escenario, hay bonitas poblaciones que a pesar de su naturaleza sofisticada han podido conservar su autenticidad y el prístino encanto alpino. Por cierto, con la Run of Fame (carrera de la fama), Arlberg dedica a sus pioneros del esquí y a sus legendarias estrellas del esquí un nuevo y espectacular circuito de esquí. Cautiva como desafío con 85 km de descensos y un increíble desnivel acumulado de 18.000 m. La ruta pasa por toda la región de esquí y en puntos de información concretos se hallan monumentos a los numerosos hijos e hijas de Arlberg.

EL PARAÍSO DEFINITIVO DE NIEVE VIRGEN
En la región de esquí de Arlberg, además de la extensa red de pistas señalizadas y preparadas, se abre todo un paraíso fuera de pista de prestigio internacional. Los freeriders, preferentemente en grupos con guía o con guías privados, experimentan una aproximación adecuada y llegan a conocer el esplendor blanco inmaculado y la auténtica autoridad de la montaña. Los guías privados dan acceso a sus clientes a los grandes tesoros paisajísticos y a impresionantes lugares menos conocidos en las montañas. Además de las numerosas semanas y campamentos dedicados al freeride, Arlberg es el único lugar de Austria donde se ofrece el heliesquí. Son pocos los destinos en los que el esquí por nieve virgen es parte esencial del ADN de lugareños y aficionados de todo el mundo. La fascinación parece ser extremadamente contagiosa.
Cualquiera que haya experimentado un descenso por nieve virgen desde el Schindlergrat o desde el Mehlsack rápidamente se considerará parte de esta comunidad tan especial y amante del esquí fuera de pista.

TODA LA VARIEDAD DEL MOVIMIENTO ALPINO
Pero incluso en Arlberg no siempre todo debe ser esquí o snowboard. Las oportunidades para disfrutar de la naturaleza de forma activa son múltiples. Una de ellas es el senderismo invernal. Una extensa red de caminos incluye una variación de senderos alpinos, a los que se puede llegar cómoda y asequiblemente en teleférico con el billete Sonnenabo. No sería Arlberg si no existiese también un sendero alternativo “fuera de pista”. Con raquetas de nieve podrá recorrer bosques y montañas profundamente nevados. Ir solo o con guía depende de los conocimientos y del gusto de cada uno. Con 80 km de pistas de esquí de fondo y de tramos para skating, los esquiadores de estas disciplinas saben que están en buenas manos. Pistas de trineo, pistas de patinaje, pistas de curling bávaro o coches de caballos: entre la excelente diversión y el romanticismo clásico se puede disfrutar de toda la gama de actividades alpinas. Estimulantes opciones de wellness y fitness las encontrará también en ARLBERG-well.com, el centro deportivo arl.rock o en sport.park.lech.

TAMBIÉN PARA GOURMETS, UNA EXPERIENCIA DE ALTOS VUELOS
Donde el paisaje despierta unas ganas inevitables por la actividad física, el apetito es también un compañero fiel, y Arlberg es el lugar ideal para saciarlo de la mejor manera: sus cinco localidades tienen la mayor concentración del mundo de restaurantes distinguidos por la guía GaultMillau, en los que los visitantes pueden deleitar sus paladares con la mejor gastronomía. Las bodegas de la hotelería disfrutan de una legendaria reputación. El concepto de calidad en los establecimientos de restauración está íntimamente presente también fuera del templo de los gourmets. Tanto si le apetece la cocina casera tradicional como si prefiere una amplia selección de platos internacionales.
Los chefs a menudo recurren a los productos locales para sus composiciones. De esta manera también transmiten un sabroso fragmento de la identidad culinaria regional.

UNIDOS PARA SIEMPRE
Igual de cosmopolitas que sus chefs, los habitantes de Arlberg brillan por sí solos. Sus embajadores —a menudo como instructores de esquí— han difundido en todo el mundo el inspirador espíritu de Arlberg. Uno de estos misioneros más destacados fue Friedl Pfeifer. Los alumnos de Hannes Schneider fundaron el resort de esquí de lujo americano de Aspen, una especie de nuevo Arlberg en el corazón de Colorado. Incluso hoy en día se puede encontrar entre Lech y St. Anton guías de esquí que han transmitido desde Australia hasta California sus artes por doquier. Durante todo el año hay huéspedes de todos los países. Muchos ya han estado por todo el mundo. Pero al final siempre vuelven. A este lugar tan especial y en el que muchos se podrían imaginar quedarse algún día para siempre. En Arlberg.

CINCO GRANDES LUGARES CON CARÁCTER
Lech, Zürs, Stuben, St. Christoph y St. Anton. Cuatro pinceladas de los cinco lugares de Arlberg:

LECH AM ARLBERG: EL ELEGANTE Y ESTILOSO PUEBLO DEL RELAX
Desde su victoria en la “Entente Florale”, Lech es considerado el pueblo más bonito de Europa.
Esto se debe principalmente al trato cuidadoso de sus habitantes con su imagen local y sus recursos. La iglesia sigue siendo el edificio más alto del pueblo y en todo el encanto cosmopolita que Lech irradia, siempre ha apostado por la calidad y no por la cantidad. Al igual que en Oberlech, la solana del lugar. La aristocracia europea y las estrellas internacionales aprecian el carácter sorprendente y elegante de pueblo de montaña, así como la gran cantidad de restaurantes de la localidad distinguidos por la guía GaultMillau, que ostenta el título de “pueblo gourmet del mundo”. Los hoteles —la mitad de 4 y 5 estrellas— y la gastronomía brillan con la máxima puntuación, tanto en el pueblo como en la estación de esquí. Un destacado evento anual es la Weiße Ring, una carrera única con más de 1.000 participantes en el circuito de esquí entre Lech, Zürs, Zug y Oberlech, el corazón de esta extensa estación de esquí.
www.lechzuers.com

ZÜRS AM ARLBERG: EL SECRETO DEL ESQUÍ EXQUISITO Y PROMINENTE
Justo después del puerto Flexenpass, flanqueado por laderas nevadas de montañas, se halla el pequeño y exclusivo Zürs. Es considerado un lugar de encuentro muy popular para la jet set internacional, que desde hace décadas aprecia el pueblo hotelero como discreto domicilio de invierno. Gracias a las amplias y nevadas laderas sin árboles, aquí el esquí por nieve virgen es una tradición y goza de prestigio. El pueblo de 150 habitantes es también la meca de las únicas rutas de aventura del heliesquí de Austria. Acompañado por un guía experto, los más experimentados disfrutan en estas rutas de momentos excepcionales fuera de pista. Zürs promete a sus huéspedes todo el confort hotelero exquisito con la comodidad del más alto nivel ante un entorno de un inmenso paisaje alpino. Un placer garantizado para todos los sentidos. 

STUBEN AM ARLBERG: UN DESTINO ACOGEDOR PARA UNAS VACACIONES DE ENSUEÑO
Idílico, de ensueño y sin embargo marcado por un sutil desarrollo por la calidad y el confort: Stuben en el lado oeste de Arlberg siempre ha sido un pueblo que emana un ambiente acogedor y tranquilo. Este idilio hace que la patria del pionero del esquí Hannes Schneider sea muy popular entre las familias. Aquí, los amantes del esquí encuentran pendientes de nieve virgen, y pueden disfrutar tranquilamente del esquí hasta bien entrada la primavera en el Albona, la montaña local,  en una de las laderas norte más bonitas de los Alpes. En los últimos años, los establecimientos de hospedaje y restauración han invertido y ampliado la oferta de servicios y, por tanto, también en el futuro. Gracias a la unión de todas las estaciones de esquí de Arlberg, será más que nunca el destino de los amantes de los deportes de invierno que buscan calidad.
www.stuben.com

ST. CHRISTOPH AM ARLBERG: EXCELENTE, EXCLUSIVO Y SEDUCTOR
El lugar a mayor altitud de Arlberg, a 1.800 m s.n.m., situado en la frontera del país entre el Tirol y Vorarlberg, pasa revista a una larga historia con los principales hitos. El pastor Heinrich Findelkind construyó aquí en el siglo XIV un hospicio para los senderistas incomodados por el clima y sentó así las bases para la comunidad religiosa de St. Christoph. Ahora cuenta con casi 20.000 miembros de todo el mundo, entre ellos algunas personas de la monarquía. El hospicio es desde hace mucho tiempo ya un excelente hotel de fama mundial. En 1901 fue también el lugar en el que se fundó el club de esquí de Arlberg, hoy uno de los clubes de esquí de los Alpes más grandes y con más tradición. No es de extrañar que esta pequeña localidad con unos 25 edificios desde siempre haya desempeñado un papel central en el desarrollo del esquí alpino y en la formación en materia de esquí de Austria. La Academia Federal de Esquí ubicada enfrente del hospicio, es una reconocida escuela para la formación de instructores de esquí y entrenadores nacionales. Y la evolución no cesa: con la galería y la sala de conciertos "arlberg1800" a mayor altitud de Europa, inaugurada en 2015, St. Christoph ofrece además del esquí también la alta cultura en el sentido más literal de la palabra.
www.stantonamarlberg.com

ST. ANTON AM ARLBERG: CLÁSICO INVERNAL DINÁMICO Y DEPORTIVO
St. Anton, el pueblo de montaña del Tirol, mantiene viva la cultura de esquí al más alto nivel. La capital del valle Stanzertal es la cuna de leyendas del esquí y desde 1928 la sede de la carrera Kandahar de Arlberg. En 2001 St. Anton fue sede del campeonato mundial de esquí alpino y la copa mundial siempre vuelve a celebrar carreras en la cuna del esquí alpino. La combinación de tradición del Tirol y la condición de cosmopolita caracteriza su atractivo especial. A pesar de la infraestructura moderna, St. Anton ha conservado su encanto de pueblo, la excelente arquitectura de calibre internacional resalta aún más este carácter. Excepcionales teleféricos, el oasis wellness ARLBERG-well.com en el centro, el centro deportivo y de escalada arl.rock, la estación de ferrocarril, hoteles de diseño: St. Anton se presenta como un destino de esquí cosmopolita que desde hace mucho ha convertido la innovación en tradición. La animada zona peatonal cuenta con elegantes comercios y diversidad gastronómica. Una gala de inauguración con estrellas de la música en el centro del pueblo marca el inicio de la temporada de invierno, y como siempre, el programa de espectáculos que se ofrece a lo largo del año no tiene comparación. El atractivo por excelencia de cada mes de abril es la Weiße Rausch, una carrera de esquí con un estatus de culto, que lleva a sus 555 participantes hasta sus límites deportivos.

CÓMO LLEGAR: ES FÁCIL LLEGAR A LA FELICIDAD
Arlberg, durante siglos una región de puertos inaccesible, gracias al arte de ingeniería ejemplar y pionera es desde finales del siglo XIX de fácil acceso, en ferrocarril y en coche. Las autopistas del este y del oeste y las líneas de ferrocarril de las estaciones de St. Anton am Arlberg y Langen am Arlberg procuran una llegada relajada. El enlace ferroviario entre Zúrich y Viena hace ocho trayectos al día. Desde los aeropuertos cercanos de Innsbruck, Friedrichshafen, Zúrich y Múnich, el servicio de transporte llevará cómodamente a los huéspedes de todo el mundo hasta su destino vacacional en Arlberg.