El elegante Beach Club de Finca Cortesín, situado en la playa de Casares a tan sólo 5 minutos del hotel abre sus puertas para convertirse, un año más, en el punto de encuentro de la Costa del Sol.
Este maravilloso enclave, decorado al más puro estilo marinero y en el que los colores blancos destacan sobre el fondo azul del mar, se convierte en el punto de encuentro ideal donde el visitante podrá disfrutar de un ambiente distendido y agradable para divertirse con amigos bajo el sol, zambullirse en el mar, descansar en sus camas balinesas, nadar en su gran infinity pool de 40 metros de longitud o saborear un delicioso cóctel mientras en el horizonte se dibuja uno de los ocasos más bellos de la costa mediterránea andaluza.
Para completar su magnifica propuesta, el Beach Club de Finca Cortesín pone a disposición de sus visitantes un restaurante en el que degustar tapas y ensaladas así como platos ligeros de irresistible sabor mediterráneo, elaborados siempre con productos de temporada.
A partir del próximo 30 de Marzo y durante toda la temporada de primavera/verano las instalaciones estarán abiertas tanto a los huéspedes del hotel como a todo aquel que, sin estar alojado, quiera visitarlo.
FINCA CORTESÍN
En el corazón de la Costa del Sol, entre Marbella y Sotogrande se encuentra Finca Cortesín. Con maravillosas vistas al Mediterráneo ofrece a sus huéspedes 67 suites que albergan grandes terrazas, jardín propio e incluso piscina privada. El Hotel dispone de un magnífico Spa de 2.200 metros cuadrados, 5 restaurantes donde degustar sabores de diferentes continentes, un campo de golf de 7.000 metros de longitud y, desde el 30 de Marzo un exclusivo Beach Club a tan solo 5 minutos del hotel. Finca Cortesin goza de argumentos de peso para conquistar al viajero más exigente.
SOBRE SLOW TRAVELLING
SLOW TRAVELLING presenta una colección de hoteles minuciosamente seleccionados para satisfacer al viajero experimentado y sibarita, aquel que sin renunciar al máximo confort está abierto a la improvisación y anhela vivir experiencias distintas a las convencionales. Los establecimientos de esta colección destacan por su cuidada estética, sus avanzadas instalaciones y la profesionalidad de su servicio, pero comparten otra característica que los hace todavía más especiales: la voluntad de aproximar a sus huéspedes a la cultura autóctona, ya sea a través de su arquitectura, de la cocina de sus restaurantes o de la hospitalidad de un personal mayoritariamente nativo.
Los hoteles de SLOW TRAVELLING se clasifican en cuatro grandes categorías en función de su ubicación, sus instalaciones y las experiencias que proponen: GOURMET TEMPLES, SPIRITUAL RETREATS, URBAN JEWELS y
LUXURY ADVENTURE.